Mil y un motivos para formarte después de quedarte en paro

Quedarse sin empleo es sin duda una situación indeseada para cualquier persona en edad de trabajar. La mejor manera de afrontarla es con una actitud positiva encaminada a la consecución de nuevos objetivos: mejorar la formación tiene que ser sin lugar a dudas el primero de la lista, y te explicamos por qué.

El Observatorio para el Análisis y el Desarrollo Económico de Internet (ADEI) acaba de publicar un estudio en el que analiza las políticas activas de empleo en relación con las tecnologías digitales. Su principal conclusión es clara: las personas paradas necesitan formarse en este campo para aumentar sus posibilidades de reinserción laboral y aprovechar las políticas de empleo existentes.

Pero éste es sólo uno de los ámbitos en los que resulta necesario mantenerse al día, no el único. Como profesional, debes mantenerte al día de las novedades en tu sector (a través de los medios de comunicación, internet, las redes sociales y tus contactos personales) y actuar en consecuencia. Tal vez necesites un curso específico sobre ese ámbito en el que no has tenido tiempo de profundizar hasta ahora o para conocer las últimas actualizaciones normativas.

Te damos algunas de las principales razones para formarte después de quedarte en paro:

  1. Mejorar tu currículum
  2. Abrir la mente a nuevas oportunidades
  3. Conocer a otras personas con las que compartes intereses
  4. Mantenerte activo/a
  5. Sentirte útil
  6. Aumentar tus posibilidades de encontrar trabajo
  7. Aprender aquello que siempre quisiste saber, y divertirte
  8. Desarrollar tus habilidades ocultas
  9. Reciclarte profesionalmente
  10. Conocerte a ti mismo/a

De acuerdo, no son mil y una, pero son un comienzo. Y seguro que se te ocurren otras, más personales y por tanto más motivadoras. Lo importante es que tengas claro que la formación no es un capricho, sino una necesidad para seguir presente en el mercado de trabajo. Y tenlo muy claro: que el paro no te pare.