Sabemos que realizar un proceso de selección para contratar a un camarero no es tarea fácil, por lo que queremos aconsejarte para que encuentres al candidato idóneo.
El camarero es la persona encargada de prestar todo tipo de servicios de alimentos y bebidas en bares, cafeterías y establecimientos de restauración. Además, debe atender al cliente utilizando las normas de cortesía y educación correspondientes para ofrecer un servicio de calidad y profesionalidad.
Entre las principales responsabilidades de los camareros, podemos distinguir:
1. Montaje y presentación de mesas para los comensales (Mise en place).
2. Recibimiento y atención al cliente. El camarero es el encargado de asesorar al cliente sobre los distintos platos y bebidas que ofrece el establecimiento. Por ello, debe conocer de primera mano las elaboraciones del menú, así como la carta de vinos. Además, debe estar capacitado para poder comunicarse en inglés con el consumidor.
3. Desarrollo del servicio de alimentos en barra, mesa y/o sala.
4. Preparación de elaboraciones sencillas y platos para prestar apoyo al equipo de cocina.
Para poder prestar los servicios desarrollados previamente, todo camarero debe cumplir con los siguientes requisitos:
▶ Disponer de vocación de servicio y orientación al cliente. El camarero idóneo es un profesional observador y atento, que se adelanta a las necesidades del cliente.
▶ Tener don de gentes que le permita comunicarse con el cliente de manera natural y fluida.
▶ Ser una persona organizada. En muchas ocasiones, trabajar en un establecimiento de restauración implica actuar en situaciones de mucho estrés con gran afluencia de personas. Por este motivo, es recomendable saber trabajar en equipo con el resto de compañeros y establecer un plan de organización para no perder la calma.
Sería conveniente que toda persona que vaya a desempeñar un trabajo de camarero tenga conocimientos en especialidades relacionadas con las técnicas de servicio de alimentos y vinos, atención al cliente, elaboración y exposición de platos, gestión de bares e idiomas, como por ejemplo:
☉ Servicio y atención al cliente en restaurante
☉ Aplicación de normas y condiciones higiénico-sanitarias en restauración
☉ Manipulador de alimentos y Alérgenos e intolerancias alimentarias
☉ Inglés profesional para servicios de restauración
Además de las dificultades para contratar a un camarero cualificado en cuanto a formación, se suma que, en la mayoría de los casos, resulta complicado asumir los costes laborales que implica la contratación de nuevos trabajadores en este tipo de negocios.
Por estos motivos, cuando se acercan periodos de mayor carga laboral, como festivos, fines de semana o el periodo estival, los empresarios del sector se encuentran ante una situación realmente complicada. En muchas ocasiones, optan por la contratación de “extras” únicamente para esos periodos, lo que supone realizar continuas altas y bajas a la Seguridad Social, además de contar con personas que nunca terminan de conocer al negocio ni a los clientes. En otras ocasiones, los empresarios deciden asumir la carga laboral con el equipo de siempre, lo que se traduce en un empeoramiento de la calidad del servicio prestado y en la imposibilidad de sacar el máximo rendimiento a los días de mayor demanda.
Una de las soluciones que los empresarios de hostelería tienen a su alcance para contratar a un camarero y que, en muchos casos desconocen, es la posibilidad de incorporar a un camarero a través de un contrato para la formación y el aprendizaje.
El contrato de formación es el contrato más bonificado en la actualidad para cualquier tipo de empresa, ya que permite ahorrarse hasta el 100% de las cuotas a la seguridad social, además de otros beneficios económicos.
Pero uno de los aspectos más interesantes de este tipo de contrato, además de sus ventajas económicas, es que el trabajador se forma a la par que trabaja, cursando un Certificado de Profesionalidad, una titulación oficial que le cualificará para desarrollar su trabajo cada vez con mayor soltura y calidad.
En la actualidad, a la hora de contratar a un camarero con un contrato de formación se pueden optar por una gran variedad de Certificados de Profesionalidad, dependiendo de la formación previa con la que cuente el candidato. Por ejemplo:
A través del contrato de formación, el camarero va aprendiendo todos estos aspectos a nivel teórico, y aplicándolos paralelamente en su puesto de trabajo. Al suponer un gran ahorro económico, el empresario puede permitirse contarlo de manera más continuada, no solo los fines de semana o periodos vacacionales, por lo que el empleado acaba conociendo a la perfección la idiosincrasia de cada negocio, sus clientes y particularidades.
Es importante además tener en cuenta que no existe limitación alguna en torno al número de contratos formativos que puede realizar una empresa. Se podrán realizar tantas contrataciones en esta modalidad como se crea oportuno.
Si crees que esta modalidad de contrato puede encajar con tu negocio y estás dispuesto a obtener el mayor rendimiento económico de la próxima campaña Semana Santa – verano 2018, podemos ayudarte. Desde Ocupa2 buscamos al candidato que mejor encaja con tus necesidades, publicando la oferta de trabajo y realizando la selección de personal de forma totalmente gratuita para facilitarte únicamente los perfiles más adecuados. Una vez encontremos al candidato perfecto, te ayudaremos además con la gestión del contrato de formación.
Puedes llamarnos al 951 55 75 57 o escríbenos a info@ocupa2.com y estaremos encantados de atenderte.
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Totalmente de acuerdo.
Es muy importante conocer cuáles son las funciones de un camarero y la formación necesaria para poder definir el perfil de trabajador que queremos en nuestro restaurante.
Ya que no es lo mismo un camarero de sala, que un camarero de barra o un barista.
Así conseguiremos hacer una mejor selección de personal y nos evitaremos problemas y malentendidos con el trabajador durante el periodo de prueba.